Se dividen en 3 fases.

Prácticas de inflado del parapente. Estas prácticas se realizan en un terreno llano, aquí aprendemos los nombres de los elementos que componen el parapente, posteriormente empezamos a practicar los inflados mediante la carrera, que es conseguir caminar inicialmente para luego poder trotar con el parapente inflado a nuestras “12” o sobre nuestra cabeza. Conseguiremos poner el parapente en nuestra vertical y lo que tenemos que procurar es que no se nos caiga, esto lo conseguimos mediante la sustentación en relación al viento y mediante los mandos que llevamos en las manos, con estos aprenderemos a dirigir al parapente por donde nosotros queramos.

En esta fase nos vamos a una ladera de 20/80 metros de desnivel. Como ya controlamos el inflado el siguiente ejercicio será correr por la pendiente y el parapente nos hará levantar del suelo y volar en línea recta hasta el aterrizaje, estas prácticas son sumamente sencillas y nos ayudaran a saber la carrera (velocidad) que debemos tener para que el parapente nos saque a volar, el freno que tenemos que dar, el correr por la pendiente sin sentarnos ni saltar y a la hora del aterrizaje el momento en el que tenemos que frenar completamente el parapente para que aterricemos suavemente en el suelo, estos son vuelos cortos (Sapitos) y hay que hacer por lo menos 50 para terminar esta fase. Es ideal que 30 de estos vuelos cortos se realicen en el parapente de la escuela, posteriormente los 20 vuelos restantes se realizaran en el parapente del estudiante que debe ir gestionando la compra del mismo en esta fase del curso.

Se vuela con el instructor en el tándem, se empiezan a aplicar los conocimientos adquiridos hasta ese momento y se comienza a practicar en el aire las distintas técnicas de vuelo en el parapente (orejas, procedimiento de aproximación y aterrizaje, vuelo en ladera, Top landing), estos vuelos se realizan en el lugar donde se volara de altura.

• Ser mayor de edad. • No poseer problemas cardiacos, osteoporosis • No estar en estado de gestación. • No limitaciones físicas. • Disponer por lo menos un día a la semana para clase. • Respetar las normas y reglamentos de la escuela.